PARA TI..... JUANA

Ustedes no conocen a Juana ni por supuesto su historia pero yo, hoy, se la voy a contar sin omitir detalles porque como ella, como ellos, son miles los que pasan a nuestro lado sin saber que tras esas personas se esconde una vida llena de amarguras y sacrificios. Son los héroes de unas páginas que no se reflejan en los medios de comunicación y que no merecen la atención del público. 

Después de aguardar mi turno, realicé mis gestiones en la mesa que me había correspondido en la oficina de prestaciones sociales. Cuando ya abandonaba la oficina se acercó a mi una señora, no mas de sesenta años, que pidió mi ayuda para que le mirara la documentación que iba a presentar, sobre todo hacía mucho hincapié en el libro de familia, para ver si todo estaba correctamente y no tener que volver otro día, pues era el segundo que iba a solicitar la ayuda social de los "cuatrocientos euros". La pobre mujer apenas sabía leer y como ella me dijo le habían enseñado las "cuatro letras" porque entonces, sabe usted, no íbamos al colegio. 


Salí de allí, abandoné la oficina, y muy cerca en un jardín próximo en la zona peatonal donde están ubicadas estas dependencias del Gobierno de España hay una cafetería muy agradable, con terraza, donde suelo hacer parada para leer la prensa y tomar un café intentando también, en vano, olvidar todo cuanto he vivido en el tiempo de espera dentro de esas instalaciones donde la gente acude, acudimos, a solucionar nuestros problemas y solicitar la ayuda que, en justicia, nos corresponde.

Al rato de estar allí sentado pasó ella y llamé su atención. Quería saber si, al final, había presentado la documentación que, por cierto, era de prorroga y si había tenido algún problema. Cuando me vio me dedicó una agradable sonrisa y me dijo que todo había salido bien. Que tenía unos meses mas para "poder respirar" con los cuatrocientos euros.
Entonces la invité a tomar un café o desayunar si quería. Al principio fue reticente pero a nada que le insistí aceptó mi invitación, hecha desde el corazón, y se sentó conmigo. 
No miré el reloj, ni falta que me hacía. Estaba muy a gusto con esa mujer y todo cuanto me contó fue como un aldabonazo a mi conciencia dormida. Habrá, desde ahora, un antes y un después tras haber estado con Juana. 


Tengo sesenta y  seis años, me dijo, y llevo toda mi vida trabajando. Toda mi vida. Estuve sirviendo casa de unos señores de Murcia los....... después conocí a mi marido, que no quería que trabajara, tenía un taller de bicicletas y con eso íbamos viviendo. Fueron tiempos muy felices. Mi marido, mi hija, tuve una hija solamente y me quedé "embarazá" muy pronto. En fin que esos años fueron los mejores de mi vida hasta que a mi marido le dio un "fallo al corazón" y se me murió muy joven. La cría tenía solamente seis añicos. 
Y aquí tienes a la Juana que se pone a trabajar en lo que salía. He "limpiao" muchas escaleras, he "trabajao" en las fábricas de conserva cuando, Molina, era Molina. Hoy ya no existe "na" de "to" aquello y la conserva se ha "perdío"
Después se casó mi hija, que no le pude dar estudios ni "na" a la pobretica mía. Se casó con un muchacho de..... pero era un "bala perdía" y yo se lo decía pero ella no me hacía caso hasta que se quedó preñá. 
Al final, tan joven y la pobre se llenó de críos en un "amen" Tié tres. Uno de quince, que ha salío al padre en lo poco formal, una nena de doce y otro de ocho que es mi debilidad.


Mi yerno está ahora mismo en la cárcel. Su mala cabecica, las compañías, las perras que son "mu malas"... Está en ....... y le quedan todavía cinco o seis años mas. Y mi hija, la pobre, con una "enfermedá" del riñón que tiene que hacerse la "dilisis" cada dos días. Y ni puede trabajar ni vale pa na. Ademas de to lo que lleva llorao la pobre mía pues, el otro día sin ir mas "lenjos" a mi nieto lo pillaron los "municipales" con una moto que no era suya. Dice que se la habían prestao pero tuvimos un "digusto" tremendo.
Y aquí me tiene usté comía de "l´artrosis" haciendo to lo que me sale. Si voy y friego en una escalera, si le lavo la ropa a una mujer mayor que vive allí cerca y la "probe" me da diez o doce euros al mes por echarle una mano. Pero es que la "probetica" no tiene ni "pa ella". Bastante hace....

Juana, mientras me contaba todo aquello, movía sus manos encallecidas e inflamadas por los años de trabajo y sufrimiento que habían soportado. Su cara, llena de arrugas, eran un mapa por donde las lágrimas en noches de soledad y amargura seguro discurrían sin ningún obstáculo. He llorao muncho en esta vida y lloro muncho, pero ¿sabe usté? lo hago por la noche en mi cama cuando nadie me ve......


Así que, entre unas cosas y otras vamos tirando "p´alante" Yo me quito el pan de la boca para que mis nietos y mi hija puedan comer. Una ya, a su edad, con algo que coma tengo bastante. No sabe usté lo malo que es esto. Y gracias a don........ el cura de la parroquia.

Yo no he sío de misas y esas cosas. Soy cristiana y estoy bautizá. Me casé por la Iglesia y mi hija, mis nietos están bautizaos, en fin que yo creo en Dios pero la iglesia no la piso mucho la verdá. Pero mire usté don............... se está portando de maravilla con nosotros.
Todas las semanas me manda "recao" para que vaya a la parroquia y me tiene "prepará" una bolsa con arroz o garbanzos o lentejas. Sus cartoncicos de leche, "madalenas" pa los chiquillos o galletas. A veces también me da plátanos o naranjas... lo que el pobre consigue. Pero no es a mi sola, no señor, se que lo hace con varias de allí. Los que lo estamos pasando mal.
Y ¿sabe usté lo que le digo? que me parece que lo paga el de su sueldecico. Lo han visto mucho por "el Pryca" comprando de to eso. Yo creo, el otro día se lo dije a mi vecina la.... que eso que nos da lo esta pagando el con sus perricas.

Esta pascua pasá nos dio hasta dos pastillas de turrón y una cajica de mantecaos y polvorones pa que mis nietos comieran dulces. Es un santo. Si hay Dios, que yo creo que lo hay, este hombre tiene que ir al cielo. Y ya le digo yo a usté que no me ve por la Iglesia. Que no puedo ir, si hasta los domingos intento hacer faenas pa sacar unas perras. Y cuando no, solo con lavar y planchar, limpiar mi casa y arreglar a mi hija que no se puede mover la pobre de la cama tengo bastante ya.


Así que así vamos. Maleando. Luchando. Lo que pasa que una ya, a sus años, esperaba de la vida mas tranquilidá. Una vejez como Dios manda. Con mi hija sana y fuerte. Mis nietos haciéndose hombres de provecho y su padre trabajando por su porvenir. Y una pues bien tranquila en su casa y sin tanta preocupación. Si yo con cuatro perras me arreglo.
Es que perdieron la casa y to ¿sabe usté? como no podían pagar el alquilé, cuando a mi yerno lo metieron preso, pues mi pobre hija tuvo que dejar la casa que la tenían en.............. y venirse a vivir conmigo y con las criaturas. A ver que iba a hacer la pobre.
Y menos mal que mi casa es mía. Que la levantó mi marío con mucho sudor y mucho sacrificio del taller de bicicletas y luego yo la fui terminando de pagar. Anda que no he fregao yo suelos y me "levantao" a las cuatro de la mañana a fregar oficinas y escaleras "pa" poder pagarla. ¿Si no de que? Estaríamos debajo el puente.


Cuando nos levantamos de la mesa habían pasado dos horas largas. Un tiempo escaso pero mas que suficiente para que, Juana, me contara su historia y su vida. Esa existencia de dolor y sufrimiento, de penas y desdichas que marcan el paso de una persona por este mundo. 
Experiencias y vivencias que son desconocidas para todos. Que a nadie parece importar en este mundo egoísta que, entre todos, hemos creado.

La historia de Juana es una mas. Un pequeño botón de muestra de gentes anónimas que pasan a nuestro lado y en las que ni siquiera nos fijamos. Gentes abocadas a la desgracia. Personas que arrastran su particular "cruz" en esta Vía Dolorosa y que, por ende, sobre las clases mas desfavorecidas el grosor de esa cruz es mucho mayor. Y el dolor de llevarla se hace insoportable. 


A ti y por ti querida Juana. Madres y abuelas. Heroínas anónimas de una sociedad egoísta, materialista, irracional pero que, gracias a ellas, miles de niños especialmente y también hijos, hijas, yernos y nueras, han encontrado en ellas el sustento de una vida llena de penurias y estrecheces. 

Que a mis nietos, ¿sabe usté? no les falte de "naica". Que aquí esta su abuela para quitarse el pan de la boca pa dárselo a ellos.

Que Dios te bendiga Juana. Ese Dios en el que tu y yo creemos, te de mañana la PAZ Y EL AMOR que tanto necesitas tras tu paso por este Valle de lágrimas.


Comentarios

Entradas populares de este blog

YA VIENEN LOS REYES MAGOS

MUERTE EN LA CALLE

EL HUESO DEL DÁTIL, CUENTO NAVIDEÑO